La chica rica August Ames está cansada de que cada chico que se entera de su rica familia se convierta inmediatamente en unos cabrones que quieren ganar confianza y hacerse con un trozo del sabroso pastel con dinero. ¿Por qué no puedes simplemente disfrutar de tu relación? Con este chico todo resulta muy sencillo, porque no es un imbécil codicioso. Besando suavemente a la belleza en la terraza, el hombre siente cómo Ames baja hasta el pene y luego comienza a chuparlo profunda y bellamente. Después de la mamada, sigue el sexo apasionado en la terraza, al final del cual el chico lame tiernamente el coño afeitado y jodido.