Veronica Vain se sentía cansada por el estrés, así que fue a un salón de masajes. Esta voluptuosa pelirroja de piel suave y pálida y enormes tetas falsas fue masajeada por una masajista morena muy atractiva Veruca James. Verónica notó que Veruca estaba haciendo algo diferente de lo que esperaba. Ella estaba agarrando piqueros y acariciando su coño peludo. Al principio se sentía un poco incómoda, pero cuando Veruca comenzó a lamer su coño, se olvidó de todo y simplemente disfrutó de esa inesperada relación lésbica. Las chicas hacían tijeras furiosamente y se tocaban las vaginas de las demás. Al final, Veronica estaba sentada en la cara hasta que tuvo un orgasmo.